lunes, 18 de mayo de 2009

Damas y caballeros

Xokaqab.

In a Pablo nub'i' in. In uxlanaq pa le ch'at rumal kosnaq. In, in tijoxel le K'iche' chabal.



Estoy escuchando "El amor es una cosa esplendorosa" con la orquesta de Ray Coniff. Y pensando en eso, mis queridos, pensaba que estoy harto del amor.

Es broma.

Pensaba que es importante madurar algunos aspectos en nuestras vidas. Una semana me escribe un padre porque su hija se deprime al leerme. Otra semana me escriben de Perú personas de edad madura diciéndome que están de acuerdo conmigo. Después me odian, después me aman y eso es la gracia de este espacio.

Damas y caballeros. Es un placer dirigirme a ustedes.

Hoy me siento pleno (aunque se me quebró una muela y mañana tengo que visitar a algún dentista), no sé con precisión por qué. A lo mejor, talvez, será porque he dejado de creer que el amor consiste en que alguien me ame. He botado la idea que la felicidad se encuentra en amar y que te amen. Y al mismo tiempo he entendido que eso no significa ser mártir y amar a quien nunca te amará, eso sería ser tonto y aunque el amor requiere tontería y locura, no se trata de eso en éste caso.

Para amar a alguien más, tuviste que haberte amado a tí mism@ antes.



Acabo de suspirar y se siente bien. Es una válvula del alma. Inténtalo. Ahhhh...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario