No quiero que digas ninguna cosa. Guarda silencio por
favor. Que tu corazón lea, que tu mente
escuche mis palabras.
La vida me ha dado lecciones, me ha sorprendido pero en
definitiva, haciendo un balance, ha sido aún más maravillosa de lo que yo
podría haberla planeado.
No soy un “buscaaventuras”, de hecho, no me gusta correr
riesgos, prefiero calcular todo, sentarme a planificar cómo haré tal y cual
cosa. Quizás por eso cuando me siento
amenazado por algo, tomo una decisión rápida: me arriesgo por completo o
abandono.
Pero esas teorías no funcionan en aquel tema que tantos
dolores y satisfacciones me ha dado: el amor.
En el amor no hay libros, no hay tendencias y tampoco pócimas mágicas.
Acá nos jugamos siempre todo.
Yo quiero sólo sonreírte, y prometerte que todo estará
bien. No sé cómo le haré, no sé qué hará
Dios, desconozco cómo sucederá, pero quiero prometerte que todo estará
bien. Sólo, por favor, quiero que tu
corazón guarde paz, que tu rostro almacene sonrisas y que tu corazón abrigue
felicidad de hacer las cosas como deben hacerse.
Este día leí una frase que decía algo así "qué tragedia amar a la persona adecuada en el momento inadecuado".
Ahora te pediré que hagas una pausa y te dediques a escuchar cada canción que te pondré acá. Que te dediques a escucharla dije. Son de esas de las que yo llamo cursilescas, la gran mayoría que dicen muchas mentiras, pero ahora transmiten en general algo que yo pensé. http://bit.ly/arXcmI
Por favor no sigas sin haber escuchado la anterior canción.
Espero que hayas sido obediente.
Cuando estábamos en carretera, en aquella penúltima fila de aquel bus que nos llevó a varios lugares occidentales, te pedí que escucharas esta canción en tu difunto teléfono: http://bit.ly/oLfBQO
Y después de todas las cosas pues uno nunca puede decir nunca: http://bit.ly/8VYbIE
Estoy feliz. Satisfecho porque la vida no está terminando ni mucho menos, lo mejor SIEMPRE está por venir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario