sábado, 13 de noviembre de 2010

Amar no es suficiente

Al principio a la mayoría les parezco reservado, callado, sumamente inteligente, interesante, diferente, prudente, respetuoso, sincero, simpático.

Y con el paso del tiempo a la gente le parezco más bien aburrido, necio, testarudo, terco y hasta "pesado" o grosero.

Curiosamente el hecho de describirme y aceptarme como necio y aburrido, también les cae mal, porque les parece que me victimizo.  No sé por qué piensan tales cosas.

La gente a veces me tiene miedo y les parece que soy "demasiado serio".  Las chicas de mi edad no quieren nunca a alguien serio.  Sólo quieren a alguien.  Y no digo "serio" pensando en boda o algo por el estilo; simplemente prefieren a alguien que no critique el sistema oligárquico, alguien que no considere el cine y Hollywood como una herramienta mediática de manipulación.

Pero es que, pídanle a un médico que deje morir a un herido.  O exíjanle a un veterinario que no hable de animales.  Mi formación social, cultural y profesional me exige eso.  Siempre pelearme contra las masas; tratar de hacer que la gente sea subversiva si queremos verlo así.

En medio de todo eso, puedo ser adorable, tierno, romántico y muy grotesco.  Una tricotomía, una dicotomía, un trastorno bipolar.

Amo, odio.  Aunque curiosamente hay a alguien que la he amado la mayoría del tiempo.  Y más curioso aún es saber cómo ella, sin importar lo que haga, no me ama.

Así que he ido descubriendo muchas cosas, pero entre ellas, ésta importante: amar, no es suficiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario