viernes, 13 de noviembre de 2009

De mi paranoia

Me han dicho que soy paranoico. Me han dicho que siempre me hago la víctima. Me han dicho sencillamente loco. Y me han dicho “¿quién te entiende?”.

Me han dicho “te amo” (unas tres o cuatro personas, aunque de forma romántica sólo hay una); he escuchado que me dicen “me gustas” y en realidad todo eso me confunde un poco.

Hace unos días escribí sobre Diana. Razoné que sentimentalmente teníamos algunas cualidades. Sigo creyendo eso, aunque ella a diferencia de mí es lo más normal posible, se ajusta vehemente a las reglas impuestas (o auto impuestas la mayoría de las veces). No digo que es malo ser normal, pienso nada más que hay ocasiones en que debemos hacer lo que queremos hacer y dejar de lado lo que “tenemos” qué hacer.

Ella es un puño de sentimientos. Pero hoy no me interesa hablar de ella, considero que a nadie le resulta relevante, ni siquiera a mí. Ella es un ser que existe, que ocasionalmente se porta agradable y punto. Esa decisión la ha tomado. Por cierto, de entre los epítetos que he escuchado sobre mi persona, nadie me había dicho que me burlaba de “sus cosas”. Normalmente soy el buen amigo que aconseja, pero para ella resulté ser alguien que se burla de su vida; así que nunca más opinaré al respecto.




En fin. Talvez estoy loco, paranoico y soy burlón, pero he decidido reírme de mí mismo siempre. Ser feliz, amar, compartir con mis amigos y sonreír más. He decidido dejar el drama y comprender que la vida es una gran bendición y muy divertida.



Post data. Una chica me regaló una vez un huevo de cera, siempre quise saber por qué.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario