sábado, 4 de julio de 2009

De las mujeres

Hoy venía para mi casa en el transporte público de mi Guatemala. Vi a una chica que es muy bonita. Para que yo diga que es "muy bonita", es porque, créanme, tiene que ser así. No es por algo en particular, simplemente soy exageradamente exigente en ese aspecto, es mi defecto, lo reconozco.

Me gustó, me gusta ella.

Me di cuenta que como diría Arjona, ellas son lo mejor que se puso en este lugar. No sabía qué hacer. Hablarle?, de qué?, en realidad soy muy tímido. Además no es la primera vez que la veo y al parecer tiene novio. Lo del novio, ya sé que no es cosa mía, pero el asunto es que después de tantos años de cruces casuales en las calles, de qué podría hablarle?

Quizás si la encontrara en una ciudad lejana, pues entonces sí le hablaría, le diría algo como "nos conocemos de algún lado".

Las mujeres. Nos intimidan, pero ellas se mueren porque les hablemos. Entonces, no nos intimiden. Sean un poco más sonrientes, amables y por favor: quítense la idea de la cabeza que eso hará que pensemos que son "fáciles". Simplemente colaborarán con la causa.

Ja.

Un abrazo.

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