miércoles, 23 de diciembre de 2009

...

Tengo una sonrisa dibujada en mi rostro. Pienso que es un poco por tu recuerdo y pienso que otro poco es porque he decidido que es mejor reír que llorar.

No te tengo y quisiera tenerte. No te veo y quisiera verte. Me gustaría saber de ti y no lo consigo.

Tengo intenciones de abrazarte y no lo logro, porque no me atrevo o porque te alejas de súbito.

Debo comprender que tú no quieres y que yo nunca dejaré de querer.

Los besos que tiras al aire, esos que regalas, esos subastados; me interesan, me seducen, pero me son lejanos.

Pensaba en el mensaje de texto que no contestaste y que soñé con que contestaras. En el día que estaba en el hospital y deseé con todo mi corazón que un milagro cósmico pasase y tú entraras por esa puerta blanca con flores; estaba recordando la vez en que había que escoger pareja para el baile y, por supuesto, no me elegiste. Recordaba el día que me despidieron por enviarte un e-mail, el cual nunca leíste, pero que yo lo envié porque quería recordarte que ese día, al igual que el anterior, te amaba.

Tenía en mi mente la llamada que hice para decirte "hola, te amo" y colgarte, pero que no sucedió así pues al ver mi número simplemente no atendiste. Pensaba en el día que llegué de sorpresa a tu casa con un ramo de rosas amarillas (las que te gustan) y que te encontré rodeada por los brazos de aquel tipo que un mes después te rompió el corazón.

Estaba recordando el día que te dije que te amaba a pesar de que tú no lo hicieras, sonreíste y me dijiste que no fuera tan ridículo.


Pensé hoy en el sueño que tuve el otro día, donde tú eras la necesitada y yo el necesario. Soñé que me amabas y para sorpresa tuya, un día de tantos, yo también te amé.


Sólo pensaba en esos momentos. Talvez porque hoy, por fin, después de tanto, has confesado que actuabas como idiota porque estabas enamorada y que te enamoraste como idiota de mí. Talvez porque hoy, estás en mis brazos y me besas sorpresivamente cada dos minutos. No sé, a lo mejor recordé eso porque te sigo amando intensamente y tú también. Porque me gustas y te gusto. Porque así es esto y así es aquello.


Esta no es una historia de desamor ni de amor. Es mi historia. Es tu historia. Es nuestra historia. Te amo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario