martes, 18 de septiembre de 2007

De sueños


Indudablemente la capacidad de soñar, es un placer y poder reservado para pocos. Claro, hablo de gente con libertad, totalmente seguros de sí mismos, de lo que quieren. El día que dejamos de soñar, dejamos de crecer. Creo que los sueños nos dan una potencia especial, sacan lo mejor de nosotros, nos hacen sentir pasión, ilusiones y algo nuevo. Es cierto, sólo soñar y soñar, sin hacer algo por ese sueño, es ser alguien que simplemente está ilusionado, pero que nunca logrará algo. Sin embargo, soñar y hacer algo, resulta en grandes consecuencias y grandes vidas. Como diría Coelho "Todo empieza con una visión fugaz o un pensamiento efímero. Y termina en obsesión", lo que quieres, lo que anhelas, siempre terminará siendo una obsesión, algo que necesitas hacer para sobrevivir. Entonces, soñar y llenar nuestra boca de risa van de la mano, es una capacidad reservada sólo para quienes tienen una verdadera libertad, no les importa las circunstancias, no creen en ningún obstáculo que está enfrente, simplemente hay perseverancia, fe y muchas ganas. Una visión la origina una necesidad, una necesidad en el corazón, una carga impuesta por alguien superior. ¿Qué pasa si estás en el hombro de un gigante? pues logras ver más allá, observas a otro nivel y observas cosas que sólo quien ha estado allí comprende. Claro, sólo estás viendo, ambicionando algo, estás soñando. Pero ver lo que quieres te hará sentir que ya estuviste allí, te hará luchar cada día por eso. Lo importante, como dijera mi amiga, es lo que haces después de un buen sueño.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario